La alimentación sostenible estará cada vez más presente en las carteras de los inversores, a lo largo de los próximos años.
El cambio hacia una alimentación más sostenible continuó a lo largo de 2021, como lo muestra el aumento de los objetivos en materia de emisiones de gases de efecto invernadero y desperdicio de alimentos, de diversos líderes de la industria alimentaria. El interés de los consumidores en dietas ambientalmente limpias y sostenibles sigue centrándose en diferentes cuestiones, como el desperdicio de alimentos, las millas aéreas, las etiquetas que muestran los impactos ambientales, las opciones vegetarianas, las proteínas vegetales y los productos orgánicos.
La alimentación basada en plantas es una de las opciones de dieta y estilo de vida cada vez más generalizadas, y el auge de su popularidad queda mostrado en las 500,000 personas que se unieron al reto “Veganuary” este año, el doble de las que decidieron hacerse veganas en enero de 2019.
Las dietas sostenibles también pueden encajar con los planes de los gobiernos para reducir las emisiones de carbono, pues un menor consumo de carne implica menores emisiones a escala nacional. Sin embargo, si bien se trata de una tendencia al alza para los consumidores, invertir en ella dista de ser salgo sencillo.
Uno de los principales problemas es la falta de empresas especializadas puramente en este ámbito. Por ejemplo, en el mercado están entrando muy pocas empresas dedicadas únicamente a productos basados en plantas que se ofrezcan directamente al consumidor, y los supermercados convencionales están ganando adeptos en el sector ofreciendo comidas veganas de marca propia en el punto de venta.
Aunque en los mercados bursátiles de todo el mundo hay pocas empresas puramente de productos basados en plantas, existen otras formas de comer de un modo más sostenible, y numerosas compañías y organizaciones, ya están trabajando para incidir de un modo positivo en las perspectivas no solo para los valores alimentarios, sino también para el medio ambiente.
Un ejemplo es Alianza Alimentaria, que crea estrategias alimentarias para que las organizaciones alcancen sus objetivos de sostenibilidad e innovación social. Alianza Alimentaria establece alianzas con grupos de interés; apoyando los objetivos de desarrollo sostenible y acompañando a las corporaciones e instituciones públicas con estrategias alimentarias.
Por otro lado, la agricultura de precisión es un ámbito en el que también debemos fijarnos en busca de empresas que aspiren a fomentar un cambio real en el suministro de productos alimenticios o de maquinaria o tecnología agrícola que permita a sus clientes analizar el rendimiento de sus campos, qué métodos y agentes químicos se están utilizando en las diferentes explotaciones, para que los agricultores puedan saber, con un grado de certeza cada vez mayor, qué contienen exactamente los alimentos que producen.
Cada vez más gobiernos y empresas están situando la reducción de las emisiones de GEI en el epicentro de sus políticas y estatutos, y esta década se está perfilando como un periodo fundamental para emprender acciones contra el cambio climático.
Los alimentos que consumimos tienen, en este sentido, un impacto enorme a largo plazo. Según un informe, la producción de carne y productos lácteos va camino de superar al sector de los combustibles fósiles y ser la industria que más contribuirá al calentamiento mundial en los próximos años. Organizaciones sin fines de lucro como Institute for Agriculture and Trade Policy y GRAIN sostienen que supondrá el 80% de las emisiones autorizadas de gases de efecto invernadero en todo el mundo para 2050.
Ante esto, se plantea un problema global que exige soluciones globales, por lo que las empresas que puedan ofrecerlas podrían lograr un mayor éxito.
La clave está en saber discernir. No todas las empresas centradas en la sostenibilidad ofrecerán los resultados deseados a largo plazo, por lo que la selección de valores es fundamental.
Lo que nadie duda es la necesidad de contar con soluciones para estos problemas tan reales, y esperamos que esta temática pueda llegar a estar más presente en las carteras de los inversores a lo largo de los próximos años. Alianza Alimentaria trabaja en los sectores privado y público, reduciendo los impactos ambientales y riesgos sociales asociados al excesivo consumo de alimentos de origen animal, por medio de estrategias de alimentación sostenible. Contáctenos.