Hacen llegar al presidente de México una carta solicitando comprometerse con una alimentación baja en carbono, previo a la Cumbre de Sistemas Alimentarios de la ONU.
El pasado 17 de Septiembre de 2021, lideradas por la Defensoría del Derecho a la Salud, diversas organizaciones de la sociedad civil entre las que se encuentra Alianza Alimentaria y Acción Climática, emitieron una carta al presidente Andrés Manuel López Obrador, solicitando que se comprometa a trabajar a favor de un sistema alimentario que proteja la salud de los mexicanos, la del medio ambiente y que respete la herencia cultural que el campo representa para México.
Resaltando los logros y compromisos del actual gobierno, principalmente en el combate a enfermedades no transmisibles atribuibles a la dieta y a la protección del maíz nativo así como el fomento al campo y rescate de las tradiciones indígenas, la carta pone un especial énfasis en cómo los métodos de producción de alimentos deben atender a la resiliencia de los ecosistemas y que el sistema en alimentario en general requiere de la colaboración de todos los sectores, y en el que las políticas alimentarias del gobierno juegan un papel fundamental.
“La reducción de gases con efecto de invernadero de los sistemas alimentarios favorecerá la autosufiencia alimentaria, dietas saludables y sostenibles, el consumo de alimentos frescos y cercanos producidos agroecológicamente, la reducción del uso de agrotóxicos y la protección de los agroecosistemas tradicionales y de la cultura alimentaria, así como la reducción del desperdicio de alimentos.” versa la carta, entre otras aseveraciones.
A la par, esta carta se suma a otras iniciativas que solicitan a las Naciones Unidas, tanto hacia la COP26 como hacia la Cumbre de Sistemas Alimentarios, incentivar más el consumo de alimentos de origen vegetal y limitar el crecimiento de la ganadería industrial.
La ganadería industrial es insostenible, aun cambiando hacia sistemas ganaderos regenerativos, si no se mantiene a raya el crecimiento en la demanda de este tipo de alimentos, debido a que los sistemas productivos que ayudan a mantener el equilibrio de los ecosistemas no pueden soportar una gran cantidad de animales en pequeñas áreas. Adicionalmente, este tipo de sistemas industrializados ha afectado a poblaciones indígenas, como es el caso de las granjas porcinas en Yucatán, que no solo contaminan los mantos acuíferos sino que afectan la culturalidad de la región.
Un cambio hacia dietas mayormente integradas por alimentos de origen vegetal, beneficiaría al campo mexicano al rescatar muchos de los alimentos que han perdido popularidad pero que proveen de nutrientes densos, y que pueden ser obtenidos con métodos tradicionales de producción como es la milpa. De la misma forma, mejoraría la salud de la población al reducir significativamente la ingesta de grasas sobresaturadas y alimentos sobreprocesados.
Alianza Alimentaria se ha sumando a este llamado hacia el presidente de la República Mexicana, porque creemos que la transformación hacia sistemas alimentarios sostenibles van de la mano de cambios en los paradigmas alimentarios que difícilmente serán posibles si el gobierno de México no permea esta urgencia en todas las políticas que tengan que ver no solo con los sistemas productivos, sino también con el ambiente alimentario que influencia las decisiones dietarias.
Las organizaciones firmantes tienen distintos focos, desde lo ambiental y social, hasta aquellas que trabajan de la mano con productores indígenas, rescatando las técnicas milenarias que respetan la tierra y los ecosistemas. Aun con distintas vertientes, las organizaciones tienen una motivación en común: un sistema alimentario sostenible y por tanto resiliente, que beneficie a los mexicanos de las presentes y futuras generaciones.
Firman esta carta:
Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo (ANEC)
Centro de Capacitación en Ecología y Salud para Campesinos (CCESC)
Defensoría del Derecho a la Salud (DDS-CCESC)
Espacio de Coordinación de Organizaciones Civiles sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales (Espacio DESCA)
IBFAN México (International Baby Food Action Network)
La Red de Acción sobre Plaguicidas y Alternativas en México (RAPAM)