La dieta de la milpa es un modelo saludable de alimentación de origen mesoamericano que se centra en productos como frijol y maíz.
La milpa es un agro-sistema productivo alimentario basado en el policultivo que puede incluir distintos vegetales según la región, aunque generalmente se refiere a la triada de maíz, frijol y calabaza.
La milpa se vuelve el eje organizador de la producción. Se complementa con el cultivo de hortalizas, árboles frutales y hierbas medicinales en el solar, actividades artesanales y servicios varios como el pequeño comercio o la atención tradicional de la salud. La milpa es una de las técnicas agrícolas más sensatas y productivas en el mundo, desde los puntos de vista ecológico y de seguridad alimentaria.
La Dieta de la Milpa es un modelo de alimentación que se basa en la cocina tradicional mexicana, en la cual se incorporan alimentos de origen mesoamericano, como el maíz, el frijol, el chile y la calabaza. El nombre de “la Dieta de la Milpa”, se refiere al reconocimiento de la importancia que tienen alimentos que forman parte de nuestra identidad nacional, y de otros como el amaranto, los quelites y demás alimentos que se consumen en México, junto con aquellos de origen externo adoptados por la cocina mexicana. Es nacional, pero tiene su especificidad y adaptación a cada región, reconociendo sus productos y saberes.
Definida en pocas palabras, es una alimentación saludable y culturalmente apropiada, porque está basada en la producción de alimentos locales y en la diversidad regional.
La Dieta de la Milpa tiene sus bases en la tradición y en la ciencia, y tiene como beneficios el balance de proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales en las cantidades que requiere el cuerpo, promoviendo el consumo de verduras, cereales como maíz y amaranto, leguminosas y frutas con alto contenido de antioxidantes y fibra, lo cual reduce el riesgo de padecer enfermedades crónico degenerativas y cardiovasculares. Es saludable también para el planeta, al reducir de manera importante la proteína animal, sobre todo las carnes rojas.
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Si se analiza solamente el aporte nutrimental de la tríada, se tiene que el maíz es fuente importante de calcio, que se eleva en la preparación del nixtamal para elaborar tortillas.
Por su parte, los frijoles contienen ácido fólico, que, de acuerdo con la variedad, oscila entre 274 y 506 microgramos por cada 100 gramos de leguminosa. En cuanto a su aporte de proteínas, si la ingesta de la leguminosa se combina con cereales se obtienen proteínas de alto valor biológico. Los frijoles son fuente de carbohidratos de absorción lenta o complejos, y cuando las moléculas de glucosa se liberan lentamente los niveles de azúcar en sangre son más bajos y estables por más tiempo. Ésta es la razón por la cual son recomendables para las personas con diabetes.
En cuanto a la calabaza, aporta fibra soluble e insoluble, la cual mejora la salud gastrointestinal. Esto reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares y ayuda en el mantenimiento de los niveles normales de glucosa en sangre.
✓ Definir las compras y diseñar los menús diarios de acuerdo a los alimentos y platillos tradicionales mexicanos, aprovechando el conocimiento culinario regional.
✓ Es importante reducir de manera significativa el consumo de productos cárnicos, especialmente de los embutidos.
✓ Evita las recetas y platillos preparados con manteca y exceso de grasas, como fritos, capeados y empanizados.
✓ El consumo de la tortilla, otras preparaciones a base de maíz, así como otros cereales y alimentos con alta densidad calórica, debe de realizarse de acuerdo a la cantidad de energía gastada al día.
✓ Aprovecha los alimentos regionales y consúmelos de preferencia en temporada. Esto los hace más nutritivos y económicos.
La Dieta de la Milpa tiene tres características principales: diversidad, adaptabilidad e integración, ya que cuenta con una gran riqueza de elementos, que se pueden adaptar de acuerdo a cada región, e integrar otros de diferentes regiones tanto del país como del mundo, siguiendo sus principios.