Pocas actividades humanas cotidianas pueden tener tanto impacto en la mayoría de los Objetivos de Desarrollo Sostenible como la alimentación.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha establecido 17 objetivos de desarrollo sostenible para que todas las entidades a nivel mundial sumen sus esfuerzos para asegurar una sociedad más justa y un ambiente más sano.
Si bien todas las organizaciones, sin importar su giro, pueden identificar acciones que contribuyen a estos objetivos, pocas actividades que tienen una interrelación entre instituciones, industria e individuos, puede tener tantos impactos como los relacionados con la alimentación a lo largo de todo su ciclo de vida.
Alianza Alimentaria ha identificado que una dieta sostenible puede tener acción directa o influencia en 13 de los 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS), siendo los principales el ODS 13 por la Acción Climática, el ODS 3 sobre Salud y Bienestar y el ODS 12 hacia una Producción y Consumo responsables.
La alimentación es un derecho universal, sin embargo, todavía hay regiones en el mundo que no tienen acceso a una alimentación adecuada, mucho menos sostenible. La globalización de los alimentos también ha generado diversos fenómenos, uno de ellos es el encarecimiento de alimentos que eran comunes en una región pero que al ser popularizados y por ende pueden ser comercializados a mayores costos cuando son exportados, pierden la característica de “asequible” para las personas. En el caso de los productos de origen animal, el grano que se utiliza para alimentar a los animales se encarece y, por otro lado, la extensión de los monocultivos, ponen en riesgo la seguridad alimentaria de muchas personas. Una dieta sostenible debe asegurar que todas las personas tiene acceso a alimentación que sea saludable, suficiente, accesible y asequible. Adicionalmente, parte de una dieta sostenible, es también impulsar el desarrollo del campo, para promover la autosuficiencia alimentaria y poner esfuerzos para que se reduzcan las desigualdades en términos de precios de venta de los productos debido a las cadenas de intermediarios, ayudando a los productores a poder distribuir sus productos sin necesidad de un tercero.
Ya hemos hablado antes de la estrecha relación que tiene la alimentación con diversas enfermedades, incluido el cáncer. Una nutrición adecuada es fundamental para llevar una vida saludable, ya que no solo aporta suficientes calorías y nutrientes para mantener operando las funciones físicas, sino también satisface distintos bienestares, desde el físico hasta el social o de comunidad, ya que en distintas culturas, la alimentación es un aspecto fundamental para la convivencia de las comunidades y familias. Se ha demostrado ya, que los componentes de una dieta ambientalmente sostenible, son también aquellos con mejores beneficios para la salud, al contener una mayor cantidad de frutas y verduras y menos productos de origen animal, así como pocos alimentos altamente procesados, apoya a distintos aspectos del bienestar humano, mientras reduce los impactos ambientales y por tanto, los efectos que en la salud humana tiene el detrimento de la salud planetaria.
La alimentación es fundamental para la adquisición de conocimientos. Un infante desnutrido no podrá desarrollar todo su potencial debido a la falta de nutrientes, por lo que es importante que tengan acceso a una alimentación sana y ambientalmente responsable. Por otro lado, las escuelas son, como lo indica la FAO, el principio del fin de la desnutrición.
Muchas mujeres en distintos países son las últimas en comer en su familia, además que las mujeres se encuentran con índices de pobreza y raquitismo mayor que los hombres en el mundo; las mujeres en situación de embarazo y lactancia requieren acceso a una nutrición distinta, por lo que una dieta adecuada es también una dieta que considera el género. Otra influencia directa de la alimentación con la equidad de género, se encuentra en las ciudades y principalmente con las mujeres trabajadoras. Cuando los patrones ofrecen como parte de las prestaciones el servicio de alimentación, aminoran significativamente la carga de la preparación de alimentos a todas las personas que se encuentran en los centros de trabajo laborando al menos 4 horas continuas. No obstante, más del 60% de las personas que tienen una alimentación alternativa por decisión propia son mujeres, lo cual evita que puedan tener acceso a una alimentación alternativa de forma segura tanto en sus centros de trabajo como en restaurantes y puestos de comida. Ello implica un menor balance de vida y trabajo porque tiempo que pueden utilizar para su entretenimiento y relajación, es utilizado para planear y preparar su comida. Los centros de trabajo que ofrecen la alimentación como prestación, están dejando fuera a muchas mujeres con dietas alternativas y en su mayoría, sostenibles. De la misma forma, es momento que estas decisiones dietarias sean tomadas por todos, no solo por las mujeres, derribando estereotipos de género sobre la alimentación.
Más del 70% del agua usada para la vida humana se destina a actividades agropecuarias, y de ello, más del 80% se destina al agua de cultivos para alimentar animales destinados a consumo. Se estima que solo la ganadería utiliza 27% de toda el agua potable del mundo. Por otro lado, la contaminación de agua asociada no solo a los fertilizantes de dichos cultivos, sino a la enorme generación de excretas animales, incluyendo la sangre proveniente de los mataderos, es un factor importante en la contaminación de suelos y aguas, tanto superficiales como subterráneas. Los fertilizantes y pesticidas provocan serios problemas ambientales y es precisamente la alimentación, en conjunto con la industria de la transformación, la principal actividad que pone en riesgo los sistemas de agua limpia y saneamiento. Por otro lado, los antibióticos que permanecen en las excretas animales son difíciles de tratar en los sistemas de tratamiento de aguas convencionales, y terminan ingresando nuevamente a la ingesta humana, generando otros problemas asociados.
Las actividades agropecuarias tienen una relación estrecha con condiciones de trabajo de alto riesgo, como la labor infantil, la trata de personas y la labor forzada. Además, la exposición constante a herbicidas, fungicidas y herbicidas, así como las excretas animales, ponen en riesgo de salud a los trabajadores. Establecer dietas sostenibles no solo cambia lo que se sirven en los platos, sino también los medios productivos hacia unos más respetuosos con el medio ambiente y la sociedad. Adicionalmente, impulsar una dieta sostenible, puede transformar el campo y por tanto fortalecer el crecimiento económico tanto de los sectores agrícolas como de otros sectores que están relacionados con la alimentación. Asegurar que la alimentación es asequible y económicamente justa, así como que optimiza los recursos humanos y naturales, promueve un desarrollo económico basado en recursos y el respeto a los individuos.
Una alimentación sostenible, implica la creación de infraestructura para poder conectar de manera más eficiente a las zonas productivas con todos los espacios donde existen asentamientos humanos y por tanto asegurar que cada rincón tenga acceso a una alimentación sostenible. Así también, innovar los procesos productivos para reducir los impactos ambientales que estos tienen, es una obligación para todas las entidades involucradas con la alimentación. Por otro lado, la industria alimenticia debe promover el consumo de más plantas y menos productos animales para asegurar que las grandes poblaciones puedan
Son las ciudades de la mayor parte del mundo, aquellas que tienen un sobreconsumo de productos con un alto impacto en el medio ambiente, principalmente productos de origen animal y productos importados, o que recorren grandes distancias para poder proveer de alimento a las mismas. Es necesario asegurar que estas ciudades se alimenten de forma sostenible, ya que en general no presentan desnutrición por falta de alimentos sino desnutrición por un sobreconsumo de alimentos inadecuados nutricionalmente o de altas densidades calóricas, además de falta de fibra. El desperdicio de comida es otro factor importante a considerar en las estrategias para las ciudades sostenibles, así como la creación de huertos urbanos para reducir el impacto de la transportación de alimentos en estas entidades.
Siendo la agricultura la actividad humana que en conjunto tiene los mayores impactos al medio ambiente, es de suma importancia que se promuevan medios de producción más eficientes en el uso de recursos naturales y humanos, no solo cambiando las tecnologías pero también replanteándose si una cierta producción es necesaria. Así también, una dieta sostenible promueve consumir solo lo necesario para llevar a cabo las actividades diarias, sin sobreconsumo, así como evita el desperdicio de alimentos y ayuda a tomar decisiones informados con respecto a los impactos sociales y ambientales de la comida. Para que una dieta sea sostenible, las decisiones de producción y consumo deben considerar todo el ciclo de vida de la comida .
Este es quizá el objetivo donde mayor influencia tiene la alimentación, debido a los gases de efecto invernadero que emite tanto la materia en descomposición por el desperdicio de alimentos y desechos propios de las cosechas, como por las excretas animales. Los impactos ambientales de los productos animales, principalmente en términos de cambio climático, pueden superar a los de otras actividades como la generación de energía, pues a lo largo de todo el ciclo de vida de los alimentos, hay emisiones asociadas al mismo alimento o a la energía necesaria para producirlo, transformarlo, transportarlo y distribuirlo.
La sobrepesca tiene una relación directa con la pérdida de biodiversidad en los mares, principalmente por la captura accidental que es inevitable en los sistemas de pesca actuales, siendo que las redes arrasan con todo tipo de especie sin distinción, y esas capturas incidentales son regresadas al mar pero ya sin vida, o entran a las cadenas alimenticias para generar alimentos de baja calidad. Así también, la mayoría de los plásticos en los océanos tienen alguna relación directa con equipos de pesca. Se estima que para 2048 no habrá peces en el mar si el consumo actual de animales marinos se mantiene como hasta el momento, por lo que es importante replantearnos fuentes alternativas de proteína y omega 3 para reducir el consumo de estos animales.
La agricultura y ganadería son la principal amenaza para las áreas forestales y la pérdida de ecosistemas, siendo la ganadería la menos eficiente en razón de la masa producida contra la tierra requerida para su producción, utilizando el 83% de la tierra cultivable. Otros alimentos que también ganan popularidad pero con rendimientos bajos, como el aguacate, amenazan también tierras forestales al expandirse sus cultivos, por lo que también es necesario considerar no solo que la alimentación sea basada en plantas, sino también de cultivos que no amenacen la biodiversidad por extensión agrícola. Es preocupante que la alimentación esté basada a nivel mundial en 12 productos de los miles disponibles.
Sin duda la alimentación toca distintos sectores económicos y sociales, sin la participación de instituciones públicas y privadas, así como el compromiso ciudadano, no será posible alcanzar la sostenibilidad en términos de alimentación, ya que se debe no solo impulsar al campo sino también transformarlo a una producción más eficiente y que priorice productos con los menores impactos ambientales, la infraestructura para distribución y que haga accesible este tipo de dieta es fundamental, para que nadie se vea en la necesidad de afectar su salud o la del planeta por falta de ofertas nutrimentales, la industria de la alimentación debe renovar su portafolio para ofrecer productos mejores para la sociedad y el medio ambiente, y a su vez, los consumidores deben tomar decisiones informadas y responsables. Es por ello, que cooperativas, productores, distribuidores, iniciativa privada, instituciones gubernamentales y consumidores deben trabajar juntos para lograr una alimentación sostenible.
Una dieta sostenible soporta varios de los ODS y es fundamental que se trabaje en esta transformación para asegurar la sostenibilidad. Sin incluir a la alimentación en todos los ODS, y no solo en el ODS 2 (Hambre Cero) será muy difícil que los otros objetivos se cumplan, ya que la alimentación tiene grandes impactos en la sociedad, las economías y el planeta.
¿Estás de acuerdo con esta visión? ¿crees que la alimentación puede estar también ligada a otros de los ODS que no mencionamos en este artículo? Deja tus comentarios y haznos saber tu opinión.