El #DíaDeLaBiodiversidad destaca la importancia de proteger la biodiversidad para mantener ecosistemas saludables y frenar el cambio climático. En 2022, la ONU estableció metas globales para restaurar ecosistemas y reducir la deforestación.
¿Te imaginas un mundo en el que solo hubiera tres tipos de plantas o cinco especies animales? La vida no sería la misma que tenemos.
Hoy conmemoramos el Día Internacional de la Diversidad Biológica para defender la variedad de vida que habita en la Tierra, desde animales y plantas, hasta los ecosistemas y los procesos naturales que los sostienen.
En 2022, los países adheridos a la Organización de las Naciones Unidas acordaron metas y objetivos para detener y revertir la pérdida de la naturaleza en 25 años.
Para ello se planteó: restaurar el 30% de los ecosistemas, reducir a la mitad los desechos de alimentos e invertir 200 mil millones de dólares anuales en estrategias que beneficien a la biodiversidad.
Es un camino largo, pero podemos hacer mucho.
Podemos establecerlo de la siguiente manera: la diversidad de especies que hay en la tierra; la diversidad genética de esas especies, es decir, variaciones heredables que ocurren en cada organismo, entre los individuos de una población y entre las poblaciones dentro de una especie; y la diversidad de ecosistemas, como bosques, océanos, ríos y praderas.
Esta biodiversidad es la base de los ecosistemas saludables que proporcionan los recursos esenciales para la vida en la Tierra. Por eso hay que protegerla.
Cuidar y conservar de nuestros ecosistemas es importante porque sustentan la vida en la Tierra y juegan un papel importante en la lucha contra el cambio climático.
Los ecosistemas terrestres son vitales para la vida del planeta. Nos sostienen cultural y económicamente, pues estos contribuyen a más de la mitad del Producto Interno Bruto global.
Entre 2015 y 2019, más de 400 millones de hectáreas de suelo se degradaron por la deforestación, el cambio climático y la contaminación.
Hay que decirlo: 90 % de la deforestación mundial se debe a la expansión agrícola. De esta cifra, la mayor parte es causada por la producción de alimentos de origen animal, ¡el 41% es causado por la industria cárnica! A ese porcentaje aún hay que sumarle la deforestación causada por la producción de otros productos como los lácteos y huevos. pues cada año 2.1 millones de hectáreas se deforestan para estos fines.
En Brasil se pierde un millón de hectáreas al año, lo cual es grave pues muchas de estas se encuentran dentro del Amazonas, el bosque tropical más grande del mundo. Este contiene la biodiversidad más rica del planeta.
Este ecosistema megadiverso no solo es vital para el sustento de sus habitantes locales, sino que juega un papel crítico en contener la crisis climática. De colapsar, el equilibrio climático global estaría fuera de control en un proceso en cascada.
Si todo sigue como hasta ahora, para 2050 más de 1,700 especies perderán entre el 25 y 90% de sus hábitats en todo el mundo.
De acuerdo con la ONU hay una serie de medidas que podemos tomar para mitigar la pérdida de diversidad:
La biodiversidad es esencial para nuestra salud y la de nuestro planeta. Protegerla requiere un esfuerzo conjunto de gobiernos, empresas y de cada uno de nosotros.
A través de la conciencia, la acción y el compromiso, podemos asegurar un futuro más equilibrado y próspero para todas las especies que comparten este hogar.
¡El futuro de la biodiversidad está en nuestras manos!